Con ponencia del senador Iván Cepeda, el Senado aprobó el ingreso de Colombia al Tratado de Escazú por 74 votos a favor y 22 en contra.
El Acuerdo de Escazú es un tratado sobre medio ambiente y derechos humanos de América Latina y el Caribe compuesto por cuatro pilares fundamentales: el acceso a la información, la participación ciudadana, la justicia en materia ambiental y la protección de defensoras y defensores ambientales.
Representa un avance en el fortalecimiento del marco normativo ambiental gracias al diálogo efectivo entre diferentes sectores de la sociedad, es decir, superar los conflictos a través del diálogo, en lugar de perseguir, señalar o asesinar a quienes tienen reparos a un proyecto que afecte el ambiente.
Colombia es el segundo país en el mundo con más conflictos ambientales y con mayor número de defensores de derechos humanos y ambientales asesinados.
Santander es epicentro de varios conflictos ambientales, entre ellos: los proyectos de fracking que Ecopetrol busca implementar en Puerto Wilches, la contaminación de importantes fuentes hídricas del departamento, la defensa del agua en contraste con la megaminería en el páramo de Santurbán y la defensa de la minería tradicional que dejó una persona muerta en el municipio de California.
La propuesta para que Colombia ingrese al Tratado de Escazú pasa ahora a la Cámara de Representantes para su debate y aprobación.