Aunque la gerente de Metrolínea, Emilcen Jaimes Caballero, expuso ante el Concejo de Bucaramanga que el Sistema de Transporte está en un proceso de reestructuración, sus explicaciones de la estrategia a seguir no dan tranquilidad sobre el futuro de la operación y la seguridad de los ciudadanos, por el contrario, generan más dudas.
Así pasó en la segunda sesión que convocó la Corporación para analizar la crisis de Metrolínea. Y muestra de ello está en las afirmaciones del concejal Tito Rangel cuando advirtió que después de diez horas de debate no quedaron claros los compromisos y acuerdos de la Administración y de la Gerente de Metrolínea.
“Sobre el tema de la flota, quedo con un sin sabor. La gerente no plantea correctivos para mejorar los talleres y el mantenimiento de los buses. Es como si no importara. Parece que todo el dinero que recibe se va a un barril sin fondo”, manifestó.
Lo que sí logró el Concejo, y por sugerencia del Concejal Tito Rangel, fue una próxima reunión, programada para el jueves 28 de abril a las 2:00 pm en el Acueducto Metropolitano, para que el Área Metropolitana exponga la estrategia de reestructuración del transporte público en Bucaramanga.
También quedó pendiente el compromiso de los alcaldes Floridablanca, Girón y Piedecuesta. En palabras del concejal Jaime Beltrán el mensaje fue directo: “mientras Bucaramanga le aporta (a Metrolínea), los otros alcaldes se hacen los pingos”.