El vendaval que ocurrió este martes 30 de julio en el municipio de Puerto Wilches dejó un balance de varios eventos, así: cerca de 500 familias damnificadas por el vendaval y tormenta eléctrica, árboles derribados, viviendas destechadas, red eléctrica afectada, entre otros.
La Oficina de Gestión del Riesgo y Desastres de la Gobernación de Santander, adelanta un censo para establecer el número exacto de familias afectadas por el desastre natural.
Con este panorama funcionarios de la alcaldía de Puerto Wilches, organismos de socorro y policía nacional trabajan para restablecer el orden en los barrios afectados por el vendaval que dejó cables de la energía y de operadores de telefonía, al igual que tejas destrozadas y árboles caídos sobre las vías.
Alberto Duarte, coordinador de Gestión del Riesgo y Desastres de Puerto Wilches, sostuvo que luego del pánico que vivieron los habitantes debido al fenómeno natural, se hace un recorrido por los sectores afectados con la Defensa Civil, Bomberos, y policía con el propósito de revisar las viviendas para establecer el daño presentando en las mismas para establecer si pueden seguir siendo habitadas.
El funcionario dijo que la entidad está evaluando las afectaciones para coordinar la entrega de ayudas humanitarias, kits de aseo y de hogar, mercados, colchonetas, tejas y amarres para techos.
Con maquinaria pesada y amarilla, se intervienen las vías que presentan fallas derivadas de los deslizamientos y caída de árboles.