“Declaramos alerta roja en el área metropolitana de Bucaramanga. Hoy la capital santandereana tiene una ocupación de camas UCI del 83%, Floridablanca y Piedecuesta del 92%, y un 73% en todo el departamento”, expresó el gobernador de Santander, Mauricio Aguilar Hurtado, este miércoles 5 de agosto en la E.S.E Hospital Local del Norte, donde el mandatario departamental junto al alcalde de Bucaramanga, Juan Carlos Cárdenas realizaron la entrega de 40 camas UCI intermedias y 7 respiradores mecánicos.
A la fecha se registran 4.752 casos de contagio por COVID-19 en el departamento. En el área metropolitana se reportan las siguientes cifras: 1658 en Bucaramanga, 901 en Floridablanca, 318 en Piedecuesta y 403 en Girón.
Asimismo, Aguilar Hurtado realizó un llamado a las empresas prestadoras de salud, “también les decimos a los gerentes de las IPS, suspender todas las cirugías programadas que puedan aplazarse para evitar ocupar las demás UCI. Tenemos que ser responsables, y desde el CRUE estaremos monitoreando, porque es de estricto cumplimiento prestar la Unidad de Cuidados Intensivos, sea el paciente que sea, del régimen subsidiado o contributivo, pero aquí tenemos que garantizarle la vida y la salud a todos los santandereanos”.
Por su parte el Alcalde de Bucaramanga, manifestó que “seguimos avanzando en la ampliación de las capacidades médicas. Hoy estamos haciendo entrega en el Hospital Local del Norte, de 40 camas UCI intermedias, que nos va a permitir seguir avanzando en el control del contagio, poder atender y seguir salvando vidas”.
Falta de cultura ciudadana
Aunque el Gobernador de Santander gestiona los equipos para atender la población afectada por el COVID-19, el uso correctamente del tapabocas, el distanciamiento físico, el lavado de manos, la limpieza continua con alcohol y gel antibacterial, se constituyen como las acciones fundamentales para frenar el avance del coronavirus.
En consecuencia, el líder comunal del Norte, Humberto Mantilla ve con preocupación la falta de cultura ciudadana de los habitantes del sector “es una lucha constante que la gente no cree en esta pandemia. Que nos pongan orden dentro de los barrios porque definitivamente el desorden es tenaz. Si usted llega aquí a las 8:00, 9:00, 10:00, 11:00 de la noche parece como si no existiera el toque de queda, la gente sin mascarillas, como los niños y los jóvenes. Pero cuando llega el virus al hogar nos estamos quejando”.