Uno de los sectores que dentro de las flexibilidades de la cuarentena ha reanudado labores es el de servicio de limpieza y aseo doméstico, para el cual el Ministerio de Salud ha adoptado el protocolo de bioseguridad para la prevención de la transmisión del covid-19.
El protocolo fue definido mediante la Resolución 1159 de 2020, en el cual se establece que previo a iniciar labores, el empleador deberá identificar si el trabajador presenta enfermedades preexistentes que sean de riesgo frente al covid-19, tales como diabetes, enfermedad cardiovascular, cáncer y Epoc, entre otras, o si es una mujer gestante o persona mayor de 70 años.
Ya con dicha información, el empleador tiene la obligación de capacitar al personal que preste el servicio respecto al protocolo y demás medidas de bioseguridad, como son distanciamiento físico de dos metros, correcto lavado de manos, buen uso del tapabocas e identificación de síntomas.
Con estas medidas, el empleado deberá usar tapabocas y cofia al manipular alimentos, mientras que los elementos de protección personal deberán ser suministrados por parte del empleador.
Dentro de las obligaciones del empleador también está establecer canales de información para que el empleado informe cualquier sospecha de síntomas o contacto con personas con diagnóstico de covid-19.
Adicionalmente, se invita a implantar una bitácora de control, donde se registren los nombres de las personas y lugares visitados dentro y fuera de la operación, así como datos de fecha y cantidad de contactos.
Para apoyar estas medidas de vigilancia se debe promover entre los empleados el uso de la aplicación Coronapp para reportar su estado de salud y el de la familia.
En otras medidas, se invita al retiro de zapatos antes de entrar a la vivienda, desinfectar los elementos, mantener el hogar ventilado, no permitir la entrada del trabajador si presenta fiebre superior a 38°, hacer la toma de la temperatura y ubicar contenedores para la separación de residuos.
Medidas adicionales por parte del trabajador
El éxito de las medidas está en que el empleado las adopte y cumpla, para lo cual se invita que con el empleador acuerde horarios flexibles para disminuir el contagio por exposición en el transporte público.
A esto se le suma que debe cambiarse de ropa al llegar al lugar de trabajo, como también al terminar labores, mantener las uñas cortas, evitar el uso de joyas, mantener el cabello recogido, al realizar actividades externas usar tapabocas, usar guantes en actividades que lo requieran, desechar los elementos de protección personal de un solo uso al terminar las actividades, cubrirse la nariz y boca con el antebrazo al toser o estornudar y abstenerse de ir a trabajar si presenta síntomas respiratorios.
Como última recomendación, está evitar saludar de mano, dar abrazos o besos, lavar la ropa después de cada postura y evitar la asistencia a lugares con aglomeración de personas.