Cerca de la media noche del jueves 11 de abril de 2024, la vida de Carlos Alberto Mosquera fue arrebatada en manos de sicarios mientras transitaba en su motocicleta de placas NDX 24G, por la calle 10 con carrera 30 frente al estadio Alfonso López de Bucaramanga.
Según reportes oficiales el hombre de 40 años alcanzó a conversar con los asesinos, pero luego uno de ellos sacó un arma de fuego y le disparó por dos ocasiones en el rostro causándole heridas fatales que, aunque fue trasladado a una clínica, murió.
Los sicarios que se movilizaban en una motocicleta de alto cilindraje una vez cometido el crimen se dieron a la fuga.
Según las autoridades la víctima tenía anotaciones por microtráfico, fuga de presos, hurto, invasión de tierra y amenazas contra terceros.