Realizando un completo recorrido por la vía central que une a Santander con la capital del país, el secretario de Infraestructura, Jaime René Rodríguez Cancino, el director del Instituto Nacional de Vías (Invías) Juan Esteban Gil, y la viceministra de Transporte, Olga Lucía Ramírez, inspeccionaron las obras que se están ejecutando en este corredor estratégico.
Luego de los daños sufridos por el paso del tiempo en el puente vehicular que conecta a Güepsa con San José de Pare en Boyacá, se iniciaron los trabajos de recuperación de la estructura. La maquinaria amarilla destinada por el Invías interviene la zona para que el paso por el puente sea reabierto con normalidad y se garantice la movilidad por este sector.
Por otra parte la variante de San Gil que tendrá 9.3 kilómetros de longitud y una inversión de 180 mil millones de pesos, también fue objeto de revisión por parte de los funcionarios que verificaron el tramo donde se realizará esta obra que inició esta semana. Asimismo, tendrá dos puentes principales de más de 500 metros que permitirá el paso de los vehículos pesados, evitando de esta manera el daño en el asfalto y accidentes en sectores céntricos del municipio.
Según lo manifestado por el Director Nacional de Invías, “esta variante será la solución definitiva para los problemas de movilidad, y el inicio de la reactivación económica en este municipio. Las obras tienen un estimado de dos años para su terminación”.
Del mismo modo, fue inspeccionado el trayecto entre Piedecuesta y Pescadero que el pasado 25 de febrero tuvo que ser cerrado debido a los derrumbes y avalanchas que afectaron 30 puntos críticos. En esta oportunidad los delegados encontraron avances importantes en las obras definitivas de este corredor vial que tuvo una inversión superior a los 50 mil millones de pesos, y que garantiza el tránsito de todo tipo de vehículos por esta vía nacional.
“Con estas obras damos paso a una reactivación económica para el departamento, así como el mejoramiento de la malla vial en varios puntos de la vía que une a Santander con Bogotá, y en el municipio de San Gil con la variante, se soluciona un problema de movilidad que viene afectando a la región desde hace varios años”, concluyó Rodríguez Cancino.