La ceremonia de ascenso de la Policía Nacional en Bucaramanga se llenó de emoción y un profundo amor que trascendió más allá de los uniformes y los grados.
En medio de una jornada que celebraba el éxito y el compromiso de los ascendidos, el Subintendente Ferney Horacio García Pinto solicitó al señor Brigadier General José James Roa Castañeda permiso para antes de iniciar la ceremonia el cual dejó a todos los presentes en asombro al dar un paso adicional, uno que demostró la valentía tanto en su labor como en su vida personal.
Frente a sus compañeros, familiares y amigos, el Subintendente García Pinto se arrodilló y, con el corazón en la mano, le propuso matrimonio a su compañera de vida, Jesica Rocío Cuevas Riaño. Fue un momento de pura emoción en el que el amor y la valentía se fundieron en un acto que quedará grabado en la memoria de todos los presentes.
Jesica Rocío Cuevas Riaño, visiblemente emocionada, no pudo evitar decir «¡Sí!» ante esta muestra de amor en medio de un evento tan significativo. Las lágrimas de alegría y emoción llenaron el lugar, y los aplausos y felicitaciones de los compañeros y amigos y de los asistentes no se hicieron esperar.
Este emotivo episodio no solo celebró el amor entre dos personas, sino que también recordó que la valentía y el compromiso que muestran los hombres y mujeres que hacen parte de la Policía Nacional en su labor cotidiana son los mismos valores que fortalecen sus vidas personales.
El Subintendente García Pinto y Jesica Rocío Cuevas Riaño son un recordatorio conmovedor de que el amor es una fuerza poderosa que puede superar cualquier desafío.
Con un emocionante «sí» como telón de fondo, el Subintendente García Pinto y Jesica Rocío Cuevas Riaño ahora se embarcan en un viaje de compromiso doble: el compromiso de servir a la comunidad y el compromiso de construir una vida juntos. Su amor es un faro de esperanza y alegría que ilumina a todos los que tienen el privilegio de conocerlos.