La plenaria de la Cámara de Representantes aprobó la Reforma Tributaria en su último debate, posterior a su aprobación en el Senado.
El Ministro de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Ocampo, reiteró que esta es la reforma tributaria más consensuada de la historia y recaudará en forma progresiva, $20 billones, en 2023 y $23 billones adicionales, para 2026. Agregó que de esta forma se impulsa la justicia social en el país, aplicando el principio de ‘quien más tiene, más paga’.
Con la reforma, dijo Ocampo Gaviria, “se combinan dos elementos esenciales: primero, una política fiscal sólida y, en segundo lugar, tendremos los recursos adicionales para impulsar el cambio y la paz total”.
El sector minero-energético será el aportante mayoritario de recursos. Se impuso una sobretasa en el impuesto de renta en las empresas petroleras y carbón, que equivale al 10% en el primer año, 7,5% en el segundo y 5% en el tercero’. Además, no podrán deducir las regalías de su impuesto de renta.
Se aprobó una sobretasa de 3 puntos a las hidroeléctricas y de 5 puntos al sistema financiero.
El impuesto al patrimonio será progresivo y por cuatro años. Las tarifas marginales serán a partir de 0,5% para los patrimonios de más de $3.000 millones, 1% para los de más de $5.000 millones y del 1,5% para los de más de $10.000 millones.
En cuanto a ganancias ocasionales y herencias, la tarifa se fijó en 15% y quien se gane la lotería tributará el 20%.
Así mismo, fue aprobada la nueva lista con menos productos ultraprocesados gravados, para evitar una afectación a los hogares más vulnerables y a los tenderos, y la disminución del gramaje de las bebidas azucaradas.
Los productos ultraprocesados tendrán un tributo del 10% a partir de 2023 y se incrementa hasta el 20%, para 2025. El pan, el salchichón, arequipe y obleas quedaron excluidos de este gravamen.
No se tendrán en cuenta algunos empaques de un solo uso para alimentos y de otros productos, con el fin de minimizar el impacto en los hogares más vulnerables.
Los legisladores aprobaron el gravamen a empresas digitales extranjeras como Spotify y Netflix. El Gobierno prefiere que establezcan subsidiarias en Colombia y así paguen los tributos como cualquier operador de telecomunicaciones.
Se mantendrán los beneficios tributarios para sectores estratégicos, como la cultura, el cine, los libros, para el ecoturismo y el impulso a la construcción de vivienda de interés social.
Para las zonas francas se determinó que deben establecer con progresividad un plan para incrementar las exportaciones y así mantener los beneficios tributarios que gozan.