Bajo los parámetros del señor director general William René Salamanca Ramírez y en los lineamientos de humanismo y profesionalización, la Policía Metropolitana de Bucaramanga y el Departamento de Policía Santander en un día lleno de emoción y orgullo, en el estadio Villa Concha de Piedecuesta fue el epicentro de un evento trascendental que reafirmó el compromiso de la Policía Nacional con la excelencia y el servicio a la comunidad a través del trinomio de la seguridad.
La Policía Metropolitana de Bucaramanga y el Departamento de Policía Santander unieron fuerzas para llevar a cabo una emocionante ceremonia de ascensos, en la que 692 mandos del nivel ejecutivo ascendieron a sus grados siguientes en trasegar de la carrera institucional, un logro que va más allá de las palabras y que destaca su dedicación sobresaliente.
Estos distinguidos hombres y mujeres policías, verdaderos pilares de la seguridad y la convivencia en nuestra región, han ascendido al grado inmediatamente superior en reconocimiento a su excepcional compromiso y servicio.
Este ascenso no es solo el fruto de cumplir con los rigurosos estándares legales de carrera exigidos por la ley y la institución, sino que también es un testimonio de su inquebrantable determinación y la manifestación de los valores que han defendido a lo largo de sus carreras: humanismo, integridad, disciplina, innovación, desempeño, derechos humanos y profesionalismo.
Este ascenso es mucho más que un simple reconocimiento; es un compromiso renovado. Estos valientes policías entienden que, con cada grado ascendido, aumenta la responsabilidad ante la comunidad. En el ámbito laboral, personal y familiar, están listos para asumir este desafío con responsabilidad y profesionalismo.
Las actitudes ejemplares que han cultivado a lo largo de los años son ahora una guía aún más valiosa en su viaje hacia la excelencia.
La Policía Nacional no olvida que detrás de cada uniforme hay una familia que ha apoyado incondicionalmente.
Las familias de los ascendidos han compartido el sacrificio y la dedicación de sus seres queridos en cada paso del camino.
En la ceremonia, las familias estuvieron presentes para celebrar junto a sus seres queridos este logro trascendental. Son un testimonio de que el servicio policial es un compromiso que abarca a toda la familia.
Los números de ascensos no son solo cifras; son pruebas tangibles de la excelencia y dedicación:
402: Subintendentes
92: Intendentes
288: Intendente jefe y
11: Subcomisario.
La Policía Nacional reafirma su compromiso inquebrantable con la seguridad y la convivencia de la comunidad bajo el lema «Dios y patria».
A estos hombres y mujeres policías ascendidos, la ciudadanía les envía las más sinceras felicitaciones. Su dedicación y sacrificio continúan siendo faros de inspiración para todos los colombianos, una promesa de un futuro más seguro y una garantía de un mañana más prometedor.