De manera clara y directa los habitantes de los páramos le dijeron al Gobierno Nacional que la Ley de delimitación de páramos tiene como propósito de fondo desalojar a los campesinos de sus tierras y favorecer la exploración y explotación minera, en beneficio de unos pocos que se quedarán con las riquezas.
Vicente Castro, vocero de la comunidad fue contundente en su intervención frente al presidente Gustavo Petro, al señalar que la Ley de páramos es para que los campesinos aguanten hambre.
“Delimiten como delimiten, no vamos a renunciar a nuestras actividades agropecuarias. No nos vamos a ir de nuestros territorios”, sostuvo.
Por esa razón le solicitaron al Jefe de Estado, modificar la Ley que les impide a los campesinos trabajar y cultivar en zonas de alta montaña.
Las delegadas de las mujeres campesinas reclamaron que se les tenga en cuenta en los procesos de transformación de la productividad rural y señalaron a las Corporaciones Autónomas Ambientales de ser “antros de corrupción”.
En ese sentido, manifestaron su solidaridad con los habitantes de El Carmen y San Vicente de Chucurí por su oposición a la licencia que entregó la CAS a la empresa minera Colcco, para la explotación de carbón en La Serranía Yariguíes.
Gloria Inés Calderón, de la Asociación de mujeres de El Cerrito, le propuso al Gobierno Nacional que impulse nuevos cultivos, recupere la producción de trigo, cebada y habas, y apoye programas de turismo campesino y ecológico.
En su intervención, el presidente Gustavo Petro no hizo referencia a la modificación de la Ley de Páramos, pero aclaró que no permitirá el desalojo de los campesinos de sus tierras. Precisó que sí existe una trampa con perjuicio del agua y de la población campesina.
Los habitantes de los páramos denunciaron que las leyes están criminalizando la actividad de los campesinos en los páramos, lo que recibió la respuesta inmediata del presidente Petro.
“Nuestra política no es criminalizar a nuestro pueblo por lo que piensa, por lo que hace, pos sus maneras de intentar sobrevivir, en medio de una situación que los ha llevado a muchos y muchas al desespero. Nadie que viva honestamente en los páramos de Colombia va a ser criminalizado en mi Gobierno”, enfatizó el Jefe de Estado, y agregó: “En este Gobierno del Cambio no vamos a criminalizar pobres”.
En el mismo contexto, el Mandatario se refirió al caso de dos campesinos que habían sido objeto de un desplazamiento en el páramo, razón por la que afirmó que “este Gobierno va a permitir ningún desalojo de los páramos de Colombia y si hay alguna denuncia estaremos atentos a corregir ese tipo de circunstancia”.
Reconoció de igual manera que los principales defensores de los páramos han sido sus habitantes y los campesinos.
“No hay mejores protectores de los páramos que quienes han vivido allí”, manifestó.
La reunión del primer mandatario con los habitantes de los páramos se desarrolló en el municipio de Málaga, Santander, después de un bloqueo de vías que realizaron los campesinos en rechazo a la Ley de Páramos y para reclamar un diálogo directo con el presidente Petro.