Cuando los medicamentos y tratamientos convencionales no surten el efecto esperado en personas con adicciones o Trastorno obsesivo compulsivo (TOC), es necesaria la implementación de nuevas alternativas que busquen alcanzar mejoría significativa. Para estos pacientes, el Instituto Neurológico del HIC introdujo la tecnología de un dispositivo neuromodulador llamado MagVenture X100, cuyo objetivo es, por medio de la Estimulación Magnética Transcraneal (EMT), ayudar a esta población que ha experimentado diversas opciones para tratar sus patologías, pero no ha obtenido los resultados deseados. Ligia Clemencia Rueda Guzmán, Psiquiatra y directora del Laboratorio de Neuromodulación no Invasiva del HIC, explica sobre este dispositivo: “se trata de un estimulador que trabaja con una técnica que ayuda a que el cerebro cambie sus funcionamientos sin requerir medicamentos, cirugía, ni invasión directa, por medio de terapias que son pioneras en nuestro campo en Santander”. El estimulador funciona así: mientras el paciente descansa de manera cómoda en una silla reclinable, se posiciona una bobina magnética sobre el cuero cabelludo en la zona previamente definida, según el trastorno a tratar. Esta bobina emite campos magnéticos que modifican gradualmente el funcionamiento de los circuitos cerebrales subyacentes.
En el caso de las adicciones, la Dra. Ligia precisa que la EMT puede dirigirse a regiones cerebrales relacionadas con el control de impulsos, la toma de decisiones y la gratificación, ayudando a regular la actividad neuronal y reducir la ansiedad o los impulsos asociados con el consumo de sustancias adictivas, principalmente las metilxantinas, anfetaminas y cocaína. Para el tratamiento del TOC (trastorno mental caracterizado por la presencia de obsesiones y compulsiones, o comportamientos repetitivos), la EMT se enfoca en áreas del cerebro relacionadas con el control motor y las funciones cognitivas. “Estos impulsos magnéticos buscan regular la actividad neuronal anómala que conduce a los síntomas obsesivos y compulsivos, ayudando a reducir la frecuencia e intensidad de los pensamientos obsesivos y los comportamientos repetitivos”, agrega Rueda Guzmán. Tratar estos trastornos mentales requiere de un número de sesiones que son determinadas según los casos. La directora del Laboratorio de Neuromodulación no invasiva, asegura que “esto dependerá de las características clínicas del paciente, la tolerabilidad al tratamiento y de la respuesta que tenga a cada sesión. Después de aproximadamente 10 sesiones, evaluamos la respuesta a través de la entrevista clínica y escalas psicométricas, y según los resultados, se define la continuación o el replanteamiento del tratamiento. Un paciente puede requerir entre 20 y 30 sesiones dependiendo de sus síntomas y de su respuesta a la terapia”. Actualmente el HIC ha brindado esta opción de tratamiento a un gran número de pacientes, que hoy cuentan una nueva historia en sus vidas, tras recibir las terapias de Estimulación Magnética Transcraneal.