Barrancabermeja, símbolo de resistencia y petróleo, hoy también es epicentro de una lucha desigual contra el crimen organizado. Aunque el Gaula de la Policía y el Gaula Militar mantienen presencia activa, los casos de extorsión siguen siendo cotidianos. ¿Por qué?
Lo que revela la noticia:
• Captura de dos presuntos miembros de ‘Los de la M’, grupo dedicado a extorsionar comerciantes en la comuna 3. Usaban armas de fuego para exigir pagos entre $100.000 y $300.000.
• Un menor de 14 años fue sorprendido lanzando droga al Centro de Internamiento CDV, evidenciando la instrumentalización de niños por redes criminales.
• La Alcaldía y la Policía reiteran el llamado a denunciar a través de las líneas 165 y 147.
¿Qué está fallando?
• Presencia no garantiza disuasión: La sola ubicación de fuerzas no desmantela las redes. Se requiere inteligencia comunitaria, protección a denunciantes y seguimiento judicial.
• Instrumentalización de menores: El uso de niños en delitos no es nuevo, pero sí alarmante. Habla de una normalización del crimen en ciertos entornos.
• Extorsión como economía paralela: En zonas donde el Estado no logra garantizar seguridad ni oportunidades, el cobro por “protección” se convierte en rutina.








