Una operación conjunta entre autoridades judiciales y policiales permitió la desarticulación de una red criminal dedicada a la explotación sexual de menores en Piedecuesta, Santander. Según el reporte oficial, las víctimas eran contactadas a través de redes sociales, donde los implicados utilizaban perfiles falsos para atraer y manipular a niñas y adolescentes.
Una vez establecida la comunicación, las menores eran coaccionadas y obligadas a prestar servicios sexuales, en un esquema que vulneraba gravemente sus derechos fundamentales. Las autoridades confirmaron que la investigación se desarrolló durante varios meses, con seguimiento digital y testimonios que permitieron identificar a los responsables.
La Fiscalía General de la Nación anunció que los capturados enfrentarán cargos por delitos relacionados con trata de personas, explotación sexual comercial de menores y uso de medios tecnológicos para la comisión de delitos. Además, se activaron rutas de atención psicosocial para las víctimas, quienes ya se encuentran bajo protección institucional.
Este caso pone en evidencia los riesgos que enfrentan los menores en entornos digitales y la urgencia de reforzar los mecanismos de prevención y denuncia. Las autoridades reiteraron el llamado a padres, cuidadores y educadores para estar atentos a los comportamientos en línea de niños y adolescentes, y reportar cualquier situación sospechosa.








