“El Carrasco se ha transformado. Es reconocido por los diferentes entes de control, y especialmente por la Superintendencia de Servicios Públicos, como uno de los rellenos que mejor se gestiona en el país”, expresó Helbert Panqueva, subsecretario de Medio Ambiente de Bucaramanga.
Asimismo, se le invitó al Gobierno Departamental a buscar una solución definitiva, en otro predio, para desarrollar un proyecto de gestión de residuos integral y así solucionar la problemática de fondo. El Carrasco recibe 30 mil toneladas de residuos sólidos al mes, provenientes de 16 municipios de Santander.
“El esfuerzo debe ser colectivo. Todos, desde nuestros entornos más cotidianos, tenemos que empezar a reducir, reutilizar y reciclar los residuos. Cambiar nuestros modelos de consumo. Que se garantice el desarrollo sostenible de la ciudad”, agregó el funcionario.
«Cerrar El Carrasco no es exclusivamente una problemática de residuos, sino primordialmente de salud pública que, en tiempos de la COVID 19, causaría una grave afectación a toda la ciudadanía. La suma de esfuerzos es vital para buscar alternativas que permitan un proceso de cierre, clausura y pos clausura favorables y que genere mínimas afectaciones», señaló el funcionario.