Una misión humanitaria de la Defensoría del Pueblo y la Iglesia Católica permitió el regreso a la libertad de la sargento del Ejército, Ghislaine Karina Ramírez, y sus dos hijos, menores de edad, quienes estaban en poder del Ejército de Liberación Nacional (ELN), en Arauca.
La gestión de la Regional Arauca permitió el regreso de la suboficial y sus hijos, de seis y ocho años, quienes fueron recibidos en aparente buen estado de salud.
El Defensor Carlos Camargo reiteró el llamado para que niñas, niños y adolescentes queden por fuera del conflicto.