El proceso de nulidad electoral contra el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán Martínez, avanza en su segunda instancia ante el Consejo de Estado, luego de que la defensa del mandatario local enfrentara un nuevo revés jurídico.
En la tarde del jueves, la Sala de lo Contencioso Administrativo del alto tribunal rechazó el memorial de aclaración y adición presentado por el abogado Humberto Sierra Porto, apoderado de Beltrán Martínez, en el marco de la demanda por doble militancia. La decisión fue tomada por el magistrado ponente Luis Alberto Álvarez Parra, quien declaró la solicitud improcedente y extemporánea, negando además la posibilidad de anular el proceso administrativo en contra del alcalde.
El fallo de segunda instancia que emitirá el Consejo de Estado será determinante para el futuro político de Beltrán Martínez, quien ya enfrenta la anulación de su elección en primera instancia por parte del Tribunal Administrativo de Santander. La defensa del alcalde había solicitado la nulidad del proceso argumentando irregularidades en la incorporación de pruebas, específicamente el formulario E-8 de la Registraduría Nacional del Estado Civil, que certifica la afiliación política del mandatario y los candidatos al Concejo en las elecciones regionales de 2023.
Con esta nueva decisión, el Consejo de Estado mantiene en firme el proceso en contra de Beltrán Martínez, dejando en manos de la Sección Quinta la definición de su continuidad en el cargo.
Si el Consejo de Estado confirma la nulidad electoral de Jaime Andrés Beltrán Martínez, Bucaramanga enfrentaría un periodo de incertidumbre política y administrativa. La salida del alcalde obligaría a la designación de un mandatario interino mientras se convocan elecciones atípicas, lo que podría ralentizar proyectos clave en seguridad, infraestructura y desarrollo social. Además, la falta de continuidad en el liderazgo municipal podría generar tensiones entre los sectores políticos y afectar la ejecución de programas estratégicos. La gobernabilidad de la ciudad dependería de la capacidad de las instituciones para garantizar una transición ordenada y minimizar el impacto en la gestión pública.
El fallo de segunda instancia del Consejo de Estado mantiene en vilo a la clase política de Bucaramanga, que sigue de cerca cada desarrollo del proceso. Mientras algunos sectores esperan una ratificación de la nulidad electoral, otros confían en que el alcalde Jaime Andrés Beltrán Martínez logre mantenerse en el cargo. La incertidumbre ha generado intensos debates sobre el futuro de la administración municipal y el impacto que una eventual destitución podría tener en la gobernabilidad de la ciudad. Con el desenlace cada vez más próximo, Bucaramanga se prepara para un posible reacomodo político que podría redefinir el rumbo de su gestión pública.