Se trata del deprimido del Mesón de los Búcaros que comunica a la Avenida Quebradaseca de Bucaramanga, donde el alcalde Juan Carlos Cárdenas había insistido en suspender los andenes de paso peatonal que se habían convertido en foco de inseguridad.
De esta manera, el deprimido solo quedó para paso vehicular y así erradicar el desorden que se formaba en este tramo por la asistencia de habitantes de calle y migrantes.
El secretario de infraestructura de Bucaramanga Iván Vargas explicó que con esta intervención también se evitan las afectaciones y obstrucciones al sistema de alcantarillado en este punto, que se habían vuelto un problema recurrente y que en tiempos de lluvia representaba un riesgo para la movilidad por este sector.