La producción de gas natural en Colombia ha registrado su nivel más bajo en más de una década, con una media de 822 millones de pies cúbicos diarios (mpcd) en los primeros meses de 2025. Esta caída del 15,1 % en enero y 19,4 % en febrero, según la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), se debe a la declinación natural de algunos campos y fallas operativas en infraestructuras clave.
Consecuencias para Santander
A pesar de contar con la refinería de Barrancabermeja, el departamento enfrenta un posible desabastecimiento de gas natural, afectando hogares, transporte público e industrias locales. La presidenta de Naturgás, Luz Stella Murgas, advierte que la disminución en la producción pone en riesgo la seguridad energética de más de 36 millones de colombianos, con un eventual incremento en costos de energía y transporte.
¿Por qué ocurre en Santander, hogar de la refinería de Barrancabermeja?
La refinería de Barrancabermeja, aunque crucial para la producción de combustibles derivados del petróleo, no opera como un centro de extracción de gas natural. Colombia depende de diversos campos gasíferos para el suministro nacional, y el descenso en la producción de yacimientos clave, junto con la falta de nuevas exploraciones, ha reducido la capacidad de autoabastecimiento.
Medidas necesarias para enfrentar la crisis
Expertos en el sector energético sugieren:
• Impulsar la exploración y explotación de nuevos yacimientos.
• Optimizar el transporte y almacenamiento de gas.
• Promover el desarrollo de fuentes de energía alternativas.
• Garantizar acuerdos de importación para suplir la demanda interna.
La situación exige decisiones rápidas para evitar impactos económicos y sociales en Santander y el resto del país. La planificación estratégica y la inversión en infraestructura serán fundamentales para estabilizar el suministro en los próximos meses.
Impacto en las tarifas de gas natural en Santander
El aumento en el precio de la molécula de gas natural por parte de los productores, sumado al mayor costo del transporte debido al cambio en las fuentes de suministro, ha generado un incremento significativo en las tarifas del servicio en Santander.
Según Vanti, la empresa comercializadora, este ajuste responde a la necesidad de incorporar gas importado para suplir la demanda nacional y a la ubicación de las nuevas fuentes de suministro en la Costa Caribe, lo que eleva los costos de transporte hacia el interior del país. Como resultado, los usuarios residenciales, comerciales e industriales han visto reflejado en sus facturas un aumento de hasta 36 %, afectando el presupuesto de miles de familias y empresas en la región.