Hoy la institución cuenta con instalaciones modernas y equipadas, se trata de 11 aulas de clases, laboratorio, biblioteca, sala de informática, restaurante escolar, baterías sanitarias, área administrativa y oficinas de rectoría, para garantizar la permanencia y la calidad educativa de cerca de 500 estudiantes.
Siendo una inversión superior a los 4.500 millones de pesos con recursos propios producto de la venta de Isagen, esta obra permite ampliar la cobertura escolar en la región. Entre tanto, estudiantes y docentes disfrutan de aulas de clase totalmente modernas con tableros móviles y dotación de equipos de alta tecnología para el laboratorio de física y química, entre otros insumos.
“Ahora tenemos más comodidad, realmente es un cambio bastante grande, porque el colegio estaba muy deteriorado y para todos era incómodo tener diferentes jornadas”, explicó la estudiante del Colegio José de Ferro de Enciso, Tania Lozano.
Con la dotación de las nuevas instalaciones se equipó las salas de docentes con el mobiliario necesario para sus actividades, un módulo bibliotecario y el menaje completo para el restaurante escolar. Además de la adecuación de áreas deportivas para el sano esparcimiento de los estudiantes.