Los expertos en justicia restaurativa coincidieron en apoyar la propuesta del Gobierno Nacional que hizo pública el ministro de Justicia, Néstor Osuna, aunque advirtieron que el ejemplo de ladrones de celulares no fue el adecuado.
El ejemplo que dio el Ministro es que en lugar de llevar a la cárcel a un ladrón de celulares, el delincuente debe pedir perdón, devolver el teléfono y pagar seis meses de cuenta a la víctima. La propuesta generó hasta risas en la ciudadanía.
Para el abogado constitucionalista Julio Enrique Avellaneda, lo que ocurre en Colombia «es que tenemos la tradición cultural -jurídica de que lo que debe primar es la sanción carcelaria, una concepción un tanto anacrónica. Se han introducido concepciones distintas como esta, la restaurativa, que pretende hacer efectiva la reparación del daño a la víctima.»
El exministro Guillermo Rivera afirma que la prioridad es la garantía del restablecimiento de derechos y no contribuir al hacinamiento carcelario.
El docente universitario, Jorge Perdomo Torres, considera que “el camino que emprende el Ministro es el correcto. La apuesta es por la justicia restaurativa y por el cambio de mentalidad de una sociedad agobiada por el odio y la desesperanza”.
El senador Humberto de la Calle dice que la propuesta restaurativa es razonable, “pero el ejemplo de robo celulares es desafortunado porque la sociedad lo percibe como plaga armada con muertos a bordo. Mejores ejemplos: cheques chimbos, inasistencia familiar, pequeñas estafas”
El abogado Iván Cancino aplaudió la iniciativa y señaló: “por fin entender que cárcel no es justicia, que muchas veces es reparación lo que se busca.”
El abogado Julián Quintana explica que la propuesta de justicia restaurativa no es descabellada, siempre y cuando exista una adecuada política social y criminal con un efectivo sistema de prevención de delitos. Y plantea: “La idea debe ser decantada. Ej. ¿El que se apropia de recursos del estado si los regresa no va a la cárcel?”