En el área metropolitana de Bucaramanga ha venido en aumento el hurto de motocicletas, su gran mayoría bajo la modalidad ‘halado’, derivado del factor oportunidad. Ante este flagelo la Policía Metropolitana de Bucaramanga, en coordinación con la Fiscalía 02 Seccional de Estructura de Apoyo de esta ciudad, han adelantado una investigación, a partir de las denuncia instauradas por las víctimas de este delito y durante 15 meses se recolecto el acervo probatorio que permitió la judicialización y captura de 08 personas, integrantes del grupo delincuencia organizada denominado ‘Los Intocables’ por los delitos de hurto calificado y agravado, receptación, extorsión y concierto para delinquir.
La investigación permitió establecer todos los roles que empleaban los hoy capturados para su accionar delincuencial, los cuales eran asignados después de las destrezas que demostraban ante el líder de la organización quien se pudo identificar como “agachadera”, un hombre de 25 años.
Los haladores fueron identificados como: Marlon, Enano, Jorge aguapanela, pavo, Jorge Eliecer y tiberio; este último a parte de su función, sería el encargago junto con el líder de comprar las motocicletas hurtadas, y después buscar comercializarlas, venderlas por partes, o extorsionar a los propietarios obligándolos a pagar su rescate.
La manera para delinquir que emplean estos delincuentes, se ha venido compartiendo en reiteradas oportunidades de parte nuestra, volviendo a recordar, que los haladores se asocian entre sí, inician recorridos en binomios en una motocicleta en búsqueda de sus víctimas, una vez consiguen el factor oportunidad, desciende el tripulante y se acerca sigilosamente, violentando los sistemas de seguridad utilizando técnicas con sus manos y sus pies, paso seguido cortan los cables del encendido electrónico uniéndolos directamente y en cuestión de pocos minutos logran su cometido.
La captura de estos delincuentes se produjo en cumplimiento de ocho (08) diligencias de registro y allanamientos, ordenadas por el Juzgado 7 Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de la ciudad de Bucaramanga, encontrando en las inspecciones a los lugares más material probatorio, representado en partes de motocicletas, que se cree habían sido desarmadas al no haber sido contactada a la víctima para el pago de su rescate, también se da la recuperación de una motocicleta hurtada en días pasados, un arma de fuego tipo escopeta artesanal y seis (06) celulares.
Otros integrantes de la banda delincuencial, entre ellos Jorge Aguapanela y Pavo, se descubrió que optan por utilizar los servicios de transporte informal (moto-taxis) solicitándole un servicio que los lleve a zonas rurales de Piedecuesta, donde ya tienen un lugar apropiado para intimidar con armas de fuego y armas cortopunzantes, obligándolos a despojarse de las motocicletas y sus pertenencias, y darse a la fuga.
Una vez la motocicleta hurtada esta ya resguardada, los antes mencionados, se ponen en contacto con el líder de la organización ‘agachadera’ donde acuerdan un valor económico, que va entre los $400.000 a $1.200.000, llevándola en horas de poco tránsito al lugar destinado dentro del grupo delincuencial como “caleta”.
Dentro de las actividades de Policía judicial empleadas para consolidar el acervo probatorio están las interceptaciones de llamadas, entrevistas a afectados, reconocimiento fotográfico, inspecciones técnicas al lugar de los hechos, entre otros.
Según la secuencia de denuncias instauradas por las víctimas, la mayor injerencia delictiva que tienen los hoy capturados, obedece al municipio de Piedecuesta, seguido del municipio de Floridablanca.
A esta organización se le señala, que estaría involucrada presuntamente en más de 80 hurtos desde el año anterior y lo corrido del presente año, lo que representaría una renta criminal de más de $200 millones.