Tan solo dos meses duró en píe el puente peatonal localizado en la vereda San Miguel del municipio de Cepitá inaugurado por la pasada administración departamental.
Eduard Jesús Sánchez, jefe de la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres, manifestó que la investigación arrojó posibles fallas estructurales en el diseño de la cimentación que impidió que la estructura se mantuviera en pie. El funcionario explicó que, en visita al terreno, que contó con el acompañamiento del contralor departamental de Santander, el contratista Construcción y Soldaduras S.A.S., y el interventor de la obra, se determinó sobre las posibles fallas que ocasionaron el colapso de la estructura de concreto y acero que cruza el río Chicamocha.
«Se logró establecer y llegar a unas conclusiones para tomar correctivos y poder poner esta obra en funcionamiento al servicio de la comunidad. En acuerdo conjunto, se estableció un plazo de 15 días para el diseño y 30 días para la ejecución de las obras por parte del contratista Construcción y Soldaduras S.A.S.», explicó Eduard Sánchez, jefe de la OGDR Santander.
Este puente peatonal es vital, pues conecta a los habitantes de la vereda San Miguel con la vereda El Basto de Curití y Aratoca, abarcando más de 115 metros de longitud y atravesando el río Chicamocha.
Desde el gobierno del General (R) Juvenal Díaz Mateus, reafirmamos nuestro compromiso con la ciudadanía y garantizamos vigilancia y control para asegurar el cumplimiento de los plazos establecidos, proporcionando así un paso seguro para los habitantes del sector.