El atroz crimen ocurrió en la vereda Mororío del municipio de Ocamonte, donde su exesposo Alirio Ardila, de 58 años, atacó con arma a Blanca María Mónica Reyes, cuando regresaba a su vivienda luego asistir a reunión de padres de familia del colegio de sus hijos.
La versión de las autoridades indica que el victimario intentó suicidarse clavándose un cuchillo en el estómago y así herido huyó en una moto con dirección al río Fonce donde se lanzó al caudal, siendo rescatado luego y trasladado a un hospital de la zona.
Según el parte médico, Ardila sufrió fracturas en sus extremidades inferiores. Versiones relatadas por familiares y amigos de Blanca María, ellos se habían separado hace más de un año.
Es el tercer feminicidio que ocurre en Santander en lo que va del 2024.
Autoridades de criminalística investigan el caso que tiene consternada la comunidad de Ocamonte.