Luego de la alteración del orden público del 27 de abril, la Universidad reportó daños en instalaciones físicas, equipos y vehículos localizados en su campus central de Bucaramanga, que se estiman en 1.200 millones de pesos.
De acuerdo con el balance hecho por diferentes dependencias de la Universidad, la zona más afectada fue el edificio donde se ubica el Centro de Tecnologías de Información y Comunicación (Centic).
En esta edificación fueron desvalijados 143 computadores marca HP que estaban instalados y al servicio de los estudiantes en el segundo y el cuarto piso de esta infraestructura. Las partes hurtadas corresponden a discos sólidos, tarjetas de memoria y procesadores.
También se registró el hurto de 300 tabletas marca Samsung que se encontraban en una bodega del cuarto piso y el destrozo de casi todas las cámaras de seguridad.
Además, la puerta de salida de emergencia en vidrio del segundo piso quedó complemente destruida. Lo mismo sucedió con las puertas de los salones del segundo piso y el acceso a las oficinas del cuarto piso.
En el pórtico de ingreso al campus central por la carrera 27 con calle 9, se reportan más daños. Aquí, cinco talanqueras con sus sistemas de protección metálica y las tarjetas electrónicas fueron destruidas e incineradas.
De otro lado, se presentó la retención y daño de dos vehículos (una volqueta y un camión turbo) utilizados en los servicios de jardinería, recolección de materiales en la Universidad, mientras que cuatro vigilantes sufrieron intimidaciones y agresión física.
Del edificio Camilo Torres fueron extraídas las llaves de los laboratorios de la Escuela de Biología y de los salones acondicionados con equipos electrónicos que conforman las aulas híbridas para el aprendizaje virtual o bajo la modalidad de presencialidad remota.
Finalmente, se evidencia violencia en la puerta del cuarto de vigilancia ubicado por la carrera 25 de la Universidad.